“Virginia camina guiada por su marido pero gira la cabeza hacia el lugar donde estuvo sentada. Unas pocas cartas, anotaciones y apuntes quedan desparramados por el suelo del andén, pisoteados por decenas de personas que corren y se desplazan a los tumbos. Los ensucian con la suela de sus zapatos, los estrujan, los desgarran. Ella los mira, cierra la mano dentro del bolsillo del abrigo, se aferra con fuerza a la descolorida cinta azul que más temprano había desanudado en la biblioteca de su casa. Es lo único que le queda. Sus recuerdos se han hecho añicos con la misma velocidad con que el tiempo ha hecho añicos su pasado… ”
Cuando Virginia Woolf desató la cinta azul
Susana Sisman
Con una escritura impecable Susana Sisman traza un retrato minucioso y conmovedor de Virginia Woolf. Situada en el último día de su vida, esta espléndida novela recrea una época y se introduce en los vínculos que la escritora inglesa tuvo con el grupo de Bloomsbury, con la escritura y con sus libros, con la depresión profunda y con la euforia, y con Leonard Woolf, esposo abnegado que se sobrepuso a todo y le dedicó su vida y sus esfuerzos hasta el último momento.
Juan Martini
Virginia Woolf está rodeada por dos guerras. La guerra externa que destruye y mata el corazón de Europa. Y la otra guerra, silenciosa, interna, que la invade con sus voces. Entre esos fuegos está Virginia. Así, jaqueada, a lo largo de un día, que no es cualquier día, sucede esta novela de Susana Sisman.
Con la sutileza de siempre –que ya es un estilo– para construir la percepción femenina, Sisman ahora modela con oficio los registros, las huellas de un pasado que, a través de cartas, de diarios íntimos, nos revelan un mundo frágil y a la vez potente: el universo de Virginia Woolf.
Hernán Ronsino
La recreación de la época, el círculo literario y el mundo interior de Virginia Woolf abre las puertas para que Susana Sisman despliegue una escritura delicada y sutil. El rodeo a través de los géneros íntimos (cartas y diarios apócrifos), nos aleja de los documentos “verídicos” y los vanos perfiles realistas, y nos acerca a una Virginia más verdadera, más compleja y capaz de interpelarnos hasta la médula…
No hay comentarios:
Publicar un comentario