"2 años escribiendo y reescribiendo la narración de los sobrevivientes.
2 años resistiendo al silencio. En la calle, en los tribunales, en las plazas.
2 años intentando escurrir, inútilmente, el agua que todo lo arrasa.
Vivimos épocas de perpetuos desbordes. Vivimos rebalsados, inundados.
Y ya no se trata de lluvias, mareas altas o sudestadas.
Hablar del carácter ´extraordinario´ de la tragedia natural, es usar la voz de los infames.
Preferimos construir certezas y dar cuenta de la desidia estatal en todos sus niveles, de la voracidad de los privados que diseñan la ciudad, que se la reparten, que se la apropian.
Y esto pasaba antes del 2 de abril del 2013, y seguirá pasando luego del 2 de abril de 2015".
No hay comentarios:
Publicar un comentario